martes, 24 de julio de 2012

Divina Pastora de Jaén

Una de las hermandades más antiguas, tradicionales y queridas por el pueblo de Jaén es la de la Divina Pastora, establecida canónicamente en la Iglesia de San Idelfonso, segundo templo en importancia de la Ciudad tras la catedral en el que además se venera a la Virgen de la Capilla, patrona de Jaén.

Su popularidad es multisecular, casi tanto como su particularísima historia. Su origen es un siglo anterior al inicio de la devoción pastoreña, ya que fue fundada a finales del siglo XVI, concretamente el día 9 de Julio de 1595, en el desaparecido convento de San Francisco, bajo el título de “La Limpia Concepción de María”, siendo su primer Gobernador, D. Marcos Tirado. Siendo por tanto, un testimonio más de fervor mariano de Jaén hacia la Inmaculada Concepción de la Virgen dos siglos y medio antes de ser proclamado el Dogma. Actualmente, la Hermandad conserva los estatutos originales de aquella primera constitución, como una auténtica y valiosa “joya”.

Según consta en nuestros escritos, sobre el año 1697, aparece con el Subtítulo de “Cofradía de los Pastores”, siendo a finales del XVIII, cuando aparece con el Título de Cofradía de la Divina Pastora, aún en el Convento de San Francisco. Ya que es en el año 1836, a raíz de la Supresión de los Conventos, por la desamortización de Mendizábal, cuando se ubica definitivamente en su actual sede canónica, la Sacra Iglesia Parroquial de San Ildefonso. Su intensa y activísima vida de hermandad se mantiene intacta hasta la llegada de la Guerra Civil española, produciéndose su posterior reorganización en el año 1942, de manos del que fue Ilustre cofrade, D. Andrés Toledano Ruíz.


La cofradía de la Divina Pastora es una de las más
antiguas y con más tradición de Jaen.
En esta Cofradía, de acendrado y definido carácter gremial, existe una neta tradición familiar, y aunque actualmente la mayoría de los cofrades no son pastores ni ganaderos, sí descienden de aquellos, en el que dicho oficio era imprescindible para poder pertenecer a dicha hermandad; como prueba inequívoca de ese legado ancestral resulta curioso leer en los libros de cuentas y actas del XIX, apellidos que aún se perpetúan en la Cofradía.

La Hermandad venera una imagen bellísima, de estilo barroco, de la escuela granadina de finales del siglo XVIII, que aunque documentalmente es anónima, se atribuye con inmensa fiabilidad al imaginero Manuel González. Iconográficamente, su grupo escultórico representa la imagen de mujer morena sedente en una peña, con atributos pastoriles, rodeada de dos borregos perfectamente tallados en madera de pino y policromados, al igual que la talla de la Virgen. Fue Restaurada por completo y con éxito durante el año de 2003.

Su fiesta se venía celebrando alrededor del último domingo de Agosto hasta el año 1976, que empezó a celebrarse el primero de Septiembre. Sus tradiciones y costumbres permanecen intactas desde sus orígenes concepcionistas, incluyendo la “Misa de Alba ó Alborada”, actualmente desaparecida.

Caben destacar: El Pregón de Exaltación a la Divina Pastora, Solemne Triduo con devoto besamanos, Fiesta Principal con peculiar redoble de tambor y cruce de banderas durante la consagración, concurso de revoloteo de banderas y Solemne desfile procesional de nuestra titular por las principales calles de la feligresía.

De escuela granadina, la Imagen de la
Pastora Jaenera es atribuida a Manuel Gonzalez.
Es interesante señalar, que debido a su singular composición de Junta de Gobierno de “fiestas”; además de la permanente, existe el cargo de Hermano Mayor, de periodicidad anual, que es visitado, el primer día de Triduo, en su domicilio, para después y en desfile corporativo, mediante pasacalles con redoble de tambor característico y disparo de cohetes, dirigirnos a nuestra sede canónica para rendir Culto a nuestra excelsa Titular y comenzarlo oficialmente. Dicho cargo es elegido el Lunes, posterior a la fiesta, junto con los abanderados, en Cabildo Ordinario, en el que se conmemora muy emotivamente el “Traspaso de la Virgen” de Hermano Mayor saliente a Hermano Mayor entrante (simbología de la imagen miniaturizada de Pastora que posee el H. Mayor en su domicilio durante todo el año y que porta sobre su vástago en los desfiles).

Desde su constitución en 2001 en Cantillana, la Hermandad de Jaén pertenece a la confraternidad de Hermandades Pastoreñas participando en los encuentros que anualmente se organizan y que en octubre de 2005 fue celebrado en Jaen, procesionando la Divina Pastora hasta la Catedral en procesión extraordinaria acompañada de las demás hermandades pastoreñas llegadas de todos los puntos de Andalucía.

La Imagen de la Divina Pastora, que fue venerada en el convento de capuchinos de Jaen y actualmente lo hace en la Basílica de San Idelfonso, es una hermosa talla de bulto redondo de fines del siglo XVIII y de autor anónimo. Se atribuye a Manuel González, de la escuela granadina, en fidedignas investigaciones de D. Rafael Ortega Sagrista. Imagen de mujer morena sedente en una peña de roca, tamaño natural con un borrego de pie en su lado derecho en actitud de acariciarlo y otro tumbado en el regazo izquierdo; posee sombrero tallado a su espalda. Realizada en madera de pino perfectamente policromada, sigue claramente el modelo fijado por Fray Isidoro y aunque posee el sombrero a la espalda para sus procesiones y cultos suele adornarse con sombrero sobre su cabeza y otras joyas fruto de la devoción que siempre ha gozado entre los Jienenses.

Junto a la Virgen se venera al Divino pastorcito, del siglo XVIII y autor desconocido, perteneció a la comunidad de Dominicas de Jaén que lo cedían a la cofradía para los cultos hasta que en los años de 1970 pasó definitivamente a la cofradía.


La Imagen miniaturizada de la Divina Pastora es
venerada durante el año en la casa del hermano
mayor y es portada en el cetro de este durante
las fiestas y cultos.
Uno de los elementos más curiosos del patrimonio de la Hermandad Pastoreña de Jaén es la Imagen miniaturizada de la Divina Pastora que el hermano mayor custodia durante todo el año en su domicilio y que en las procesiones y cultos aparece sobre su vara. Se trata de una Imagen del siglo XVIII de pequeñas dimensiones realizada en madera policromada con un borrego a su lado de pie. Se conserva en una Hornacina durante todo el año en casa del Hno. Mayor y antaño se guardaba en el convento de las Dominicas, primero y de las Bernardas, después.

Recientemente se ha querido completar la iconografía de la Divina Pastora con la incorporación de la Imagen del Arcángel San Miguel, realizada por José María Bonilla Garrido en el 2011 y que procesiona en la trasera del trono de la Divina Pastora.

La sede canónica de la Hermandad es la Basílica-Santuario de Nuestra Señora de la Capilla y Sacra Iglesia Parroquial de San Idelfonso, segundo templo más importante de la ciudad; edificado de estilo gótico con añadidos posteriores en el que radican varias hermandades y se rinde culto a la patrona de la ciudad. En un retablo barroco adosado a la nave derecha se venera la Divina pastora, teniendo como fondo un paisaje con la ciudad de Jaén. Hasta la desamortización, contó con un camarín en la Iglesia de San Francisco.


El paso de la Divina Pastora es de orfebrería, realizado por Manuel de los Ríos en 1995 sustituyendo al anterior construido en la década de 1950. En el año 2009 se remodeló añadiéndose dos capillas laterales con las Imágenes del Beato Diego José de Cadiz y San Francisco de Asís, hasta esta fecha era llevado por anderos, actualmente lo hace con una cuadrilla de hermanos costaleros.

Posee uno de los juegos de insignias más completos entre las cofradías de Jaén, destacando las tradicionales banderas que los abanderados hacen bailar al son del tambor en las fiestas; las originales varas o báculos cuya galleta con forma de relicario guardan una estampa de la Pastora; La bandera concepcionista, el estandarte corporativo, el Simpecado o el antiguo estandarte de color blanco con pinturas, que actualmente se utiliza en los funerales de los cofrades. Desde su beatificación, custodia una reliquia del Beato capuchino fray Leopoldo de Alpandeire que es expuesta a la veneración de los fieles en su fiesta, el 9 de febrero.

La Divina Pastora goza de una gran
devoción en Jaén

La Ilustre, Fervorosa y Muy Antigua Hermandad de la Pura y Limpia Concepción de María y Archicofradía de la Divina Pastora de Almas, que es el título completo de la cofradía, celebra numerosos cultos en honor de su titular a lo largo del año destacando sus tradicionales fiestas de Septiembre, que conforman una de las más genuinas,, tradicionales y entrañables muestras festivas de la capital del Santo Reino.

La composición organizativa de la cofradía es bastante peculiar, al poseer una junta de gobierno encabezada por su presidente que es elegida por los hermanos cada tres años en que se convocan elecciones pero además cada año es elegido un mayordomo que presidirá junto al presidente los cultos portando el “báculo de la Virgen” con la miniatura de la Pastora que conservará durante todo el año en su casa expuesta en una hornacina. El mayordomo es elegido el lunes posterior a las fiestas.

El primer domingo de Septiembre es la fiesta principal precedida de un solemne triduo. El primer día, la cofradía acude a recoger al mayordomo con los abanderados. Los abanderados son un grupo de cuatro que portan las banderas y que gozan de un especial reconocimiento dentro de la cofradía, hasta el punto que para ser mayordomo es necesario haber sido abanderado durante cuatro años. Con el Repique del tambor y las banderas se inicia el desfile hasta el templo para iniciar los cultos.

El domingo por la mañana, el abanderado 1º, ofrece el tradicional desayuno, para ello acude del mismo modo los abanderados y la cofradía formando otro desfile similar que se repite al mediodía para la comida de confraternización o el lunes en la casa del vice-hermano mayor.

Antiguo estandarte de la Cofradía.
Estos desfiles y los tradicionales revoloteos de las banderas que desde muy antiguo se realizan, son de las estampas más propias de las fiestas pastoreñas de Jaén. Se realiza una exhibición o concurso de revolotear las banderas en la plaza de San Idelfonso donde acuden miles de Jienenses a contemplar como los cofrades (o pastores) revolotean la bandera.

El momento más esperado es sin duda la magna procesión con la Divina Pastora por las calles de la Ciudad, la tarde del primer domingo de Septiembre. La misma parte desde la Iglesia de San Idelfonso recorriendo las principales calles en las cuales se congregan numerosos vecinos para contemplar el paso de la Virgen que goza de una gran devoción popular. La Divina Pastora es acompañada por toda su cofradía, dos bandas de música, hermanas luciendo la clásica mantilla española, representaciones, abanderados, y niñas y señoras con el traje de Pastira, el traje típico de Jaén.

Entrada la noche, la Virgen regresa a su templo, el lunes tiene lugar el cambio de mayordomo. Durante el resto del año, la cofradía organiza numerosos cultos y eventos, contando con la masiva participación de los cofrades. De los de carácter extraordinarios celebrados últimamente destaca la celebración del IV centenario en 1995 o el encuentro de la confraternidad de hermandades de la Divina Pastora, en el 2005, en que se congregaron en torno a la Pastora Jienense hermanos pastoreños llegados de numerosos lugares de Andalucía, siendo trasladada procesionalmente a la S. I. Catedral la Imagen de la Pastora.

Allí presidió una Solemnísima Función Religiosa, posteriormente los asistentes veneraron el famosísimo “Santo Rostro” conservado en la catedral. Por la tarde, la Virgen regresó a San Idelfonso en una lucida procesión extraordinaria que congregó a todos sus devotos.

Web de la Cofradía

La Pastora es venerada en su altar propio de la Iglesia de San Idelfonso, el segundo templo de la ciudad del Santo Reino tras la catedral.


La Divina Pastora en su paso procesional, su procesión a principios de Septiembre es una de las más tradicionales de la ciudad.

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